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También esto pasará, Milena Busquets (Anagrama)

Me he de decidido a leer También esto pasará, de Milena Busquets, una de las revelaciones editoriales del año, en uno de esos pocos casos donde crítica especializada y público parecen haberse puesto de acuerdo.
 
Portada de También esto pasará

No voy a esconder mis reservas previas a esta lectura. Suelo recelar de tanta unanimidad. Si a esto se le une el "pedigree" familiar de la autora (Milena Busquets es hija de la magnífica editora ya fallecida Esther Tusquets, fundadora de la histórica Lumen), mis sospechas iban encaminadas a pensar que me enfrentaba a una especie de producto dirigido al éxito, sin otro mérito necesario que el de la varita con el que algunos libros son tocados y en los que a menudo se echa de menos literatura de verdad.
 
Acabo de terminar de leerlo y puedo decir bien alto que También esto pasará es una gran novela. Conmovedora, real, sincera, luminosa, entregada y valiente. Es una narración en primera persona sobre el dolor tras la pérdida de un ser querido; también sobre lo que sigue al dolor, la vida sigue con los que se quedan y con el recuerdo de los que no están. El recuerdo como un personaje más, como una compañía permanente de los que te siguen acompañando después de la muerte, esos sin los que no seríamos quienes somos, a los que le debemos tanto.
 
Escribir sobre la muerte de una madre es un ejercicio difícil y cargado de valor. Hacerlo sin caer en tópicos, elaborando un discurso sincero, desde dentro, sin la carga emotiva que puede deformarlo todo, y conseguir que el lector te acompañe no por compasión, sino con entusiasmo y complicidad es algo que sólo se puede conseguir si el que escribe se entrega con absoluta humildad. Todo eso es lo que se siente leyendo el libro-testimonio de Milena Busquets.

Milena Busquets
El relato, en primera persona, corresponde a Blanca - personaje de ficción - en una historia que comienza - y termina - en un cementerio. En medio, su vida rodeada de amigos, de los hombres de su vida (sus dos ex-maridos), sus hijos, su retiro a Cadaquest, a la casa de su madre, sus pensamientos, sus recuerdos y sus expectativas en la vida. Y su madre fallecida, el recuerdo, que lejos de idealizarlo, le acompaña con sus luces y sus sombras (qué relación entre padres e hijos no está llena de luces y sombras).
 
Blanca es en realidad la propia Milena Busquets. Esa manera de "transformarse" en personaje de ficción en la piel de Blanca se convierte en un recurso literario que imagino necesario para poder afrontar con claridad y franqueza un episodio tan personal de su vida. La autora no nos engaña en ningún momento, el lector asume y entiende esa licencia, probablemente la única posible para escribir de uno mismo sin caer en el sentimentalismo propio de los testimonios personales, concebidos más para uno mismo que para otros.
 
También esto pasará invita a una lectura placentera y tranquila. He dejado pasar unos días para escribir sobre ella, y he podido comprobar que es de esos libros que crece con el tiempo, que consigue lo que pretende precisamente porque parece no querer pretenderlo: que nos demos cuenta de que las grandes historias son las que están formadas por nuestras pequeñas historias cotidianas, nuestros éxitos, nuestros fracasos, nuestras decepciones y nuestras pequeñas alegrías. Trocitos de vida.
 
No dejéis pasar este libro, leedlo y disfrutadlo. Dadle la vuelta y hacedlo vuestro, porque También esto pasará habla de nosotros, del día después, de todos los días después que componen nuestras pequeñas grandes vidas.


Comentarios

  1. A mi me pareció una estafa de libro, las correrías de esta mujer por su pueblo, y todo un sin sentido

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    Respuestas
    1. Probablemente no es una obra maestra, pero no me pareció una estafa, ni muchísimo
      menos. Me pareció una historia personal, sincera y muy bien escrito.
      Gracias por tu opinión. Un abrazo.

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